¿Autosaboteamos nuestra preparación para la jubilación?

Para responder esta pregunta propongo el contexto basado en aspectos generales propios de nuestra cultura. En ese sentido, la respuesta a esta pregunta podría ser muy distinta y amplia dependiendo bajo qué perspectiva la abordemos, por ejemplo;

• Financieramente: ¿por qué no ahorramos y generamos patrimonio?
• Familiarmente: ¿por qué no cuidamos y mejoramos nuestras relaciones?
• Personalmente: ¿por qué no hacemos ejercicio, leemos, o aprendemos algo más?
• Socialmente ¿por qué no participamos o apoyamos alguna iniciativa como voluntarios?

Podríamos seguir hasta tener una lista de cosas interminable, pero desde mi punto de vista solo hay una respuesta y ésta es simple y sencillamente porque no queremos hacerlo, es decir, no tomamos acciones para realizarlo.

Observo que independientemente de la generación en la que estamos, la responsabilidad o rol que jugamos, o el nivel socioeconómico que tenemos, en general no tomamos acción sobre lo que deberíamos de hacer para estar mejor preparados para muchas situaciones de la vida, pero en el caso particular de la jubilación pensamos que es algo lejano, que falta mucho tiempo, que las cosas no van a cambiar.

Cuando alguien ya está cercano o en su momento de jubilación, entonces reflexiona, se da cuenta de la realidad y de que no hay tiempo que perder para tomar acciones que puedan mejorar su situación e intereses personales en esa siguiente fase de vida.

¿Por qué esperar hasta llegar a tener la situación enfrente?, en mi experiencia propia, con clientes, y en general, observo que durante muchos años estuvimos dedicados a trabajar y trabajar sin darle tiempo a muchas otras cosas igual o más importantes. Le dedicamos prácticamente todo nuestro tiempo y le dimos prioridad a otras cosas que no necesariamente eran nuestras, incluso mi percepción es que la situación laboral actual ha agravado esta problemática . ¿Por qué si la empresa o nuestra actividad nos demanda algo lo hacemos sin chistar y sin importar el tiempo y esfuerzo que represente, y lo nuestro no? ¿Por qué si la familia o sociedad nos piden algo lo hacemos sin pensar y lo nuestro no? ¿Por qué decidimos comprar algo que no necesariamente necesitamos sin pensarlo, y hasta aceptamos pagarlo en varios meses o años “sin intereses” y no dedicamos parte a nuestro ahorro? Las preguntas anteriores son solo de ejemplo, y no estoy argumentando que ya no debamos de hacer lo que hacemos, pero estoy convencido de que el balance es algo muy importante.

Creo que mucho de lo que sucede al tomar nuestras decisiones tiene que ver con el nivel de consciencia con el que las tomamos, es decir, el nivel de entendimiento y conocimiento que tenemos sobre el aspecto en particular, y en el cual deberíamos de invertir algo de tiempo y profundizar.

En mi experiencia, el único reto a vencer somos nosotros mismos, necesitamos regalarnos más tiempo para entendernos mejor y profundizar en aspectos relevantes para nosotros mismos, de esa manera podremos encontrar nuestras propias respuestas y consecuentemente tomar mejores decisiones y acciones.

En Retirement Advising tenemos la experiencia y hemos desarrollado las herramientas necesarias para apoyar a nuestros clientes a encontrar sus propias respuestas y así poderse preparar para vivir esa nueva etapa de vida de manera satisfactoria y con plenitud.